Podemos acompañarte en el camino hacia la recuperación o la de un familiar cercano.
Aunque no es fácil, el alcoholismo puede superarse y tú ya has dado el primer paso
Bienvenidos
Reflexiones es un lugar donde puedes resolver tus dudas sobre el alcoholismo y los problemas relacionados con el consumo del alcohol de la mano de un equipo encabezado por el Dr. Reina.
Es un espacio donde te podemos acompañar en tu camino hacia la recuperación o un familiar cercano.
Aunque no es fácil, el alcoholismo puede superarse y tú ya has dado el primer paso.
EL PROBLEMA Y CÓMO SOLUCIONARLO
El alcoholismo es una de esas adicciones que parece que sólo afecta a personas que rozan la exclusión social. Nada más lejos de la realidad, se trata de una enfermedad que afecta a padres de familia, madres trabajadoras, estudiantes… Es una adición que no distingue de género, edad o clase social.
Se trata de una enfermedad grave y compleja, en la que todos los casos comparten ciertas características comunes. A su vez también se suelen encontrar ciertas particularidades, propias de las circunstancias de cada persona que padece alcoholismo, así como de sus familiares. Tanto los aspectos comunes como los aspectos propios de cada caso, deben ser tenidos en cuenta si se quiere conseguir una recuperación.
Para poder superar la adicción, se hace necesaria la ayuda de profesionales especializados.
La recuperación conlleva un proceso que es lento, pero con altas probabilidades de éxito en la mayoría de los casos. Si este proceso se realiza de una manera adecuada, tanto la persona que padece alcoholismo, como sus familiares pueden recuperar unos hábitos de vida y unas rutinas normalizadas, lejos del conflicto y los problemas ocasionados por el alcohol.
En muchos casos, es frecuente que la demanda de ayuda venga por parte de los familiares. En pocas ocasiones es la propia persona alcohólica quien solicita la ayuda. Esto se debe a que la enfermedad conlleva una falta de conciencia sobre el problema, así como la negación del mismo. Es por ello que las primeras fases del tratamiento van dirigidas a trabajar sobre la negación y el proceso de aceptación del problema.
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SOBRE MÍ
Soy Félix Reina, Psiquiatra, Doctor en Medicina y Terapeuta Familiar. Llevo más de 30 años tratando enfermos alcohólicos y a sus familias.
Hasta ahora yo me venía ocupando de todo el desarrollo de Reflexiones. He contado con la ayuda esporádica de algunos expertos, a los que he ido entrevistando, y con la colaboración de algunos alcohólicos y familiares que han contado sus experiencias.
En este nuevo periodo de reflexiones, he planteado objetivos más ambiciosos. Vamos a pasar de la mera información, a la formación y al acompañamiento. Para ello he necesitado la colaboración estrecha de algunos profesionales que trabajan conmigo en el Instituto Bitácora. Se trata de profesionales especializados en diferentes áreas específicas y con amplia experiencia en su campo, que se encargarán de llevar a cabo diferentes tareas dentro de Reflexiones.
CÓMO TRABAJAMOS
En Reflexiones consideramos que es importante que el tratamiento se adapte a cada persona y a la etapa en la que se encuentra. Para ello, es necesario estudiar su personalidad, su dinámica familiar, sus circunstancias socio laborales, sus expectativas, y su nivel de motivación para poder realizar un acompañamiento y una intervención adecuada, de forma personalizada en todo el proceso.
En la primera fase del tratamiento, tenemos muy cuenta la rueda del cambio -Prochaska y Diclemente- para explicar cómo funciona la motivación que experimenta un alcohólico, a través de las diferentes fases por las que pasa en su camino hacia la recuperación. Es importante conocer en qué etapa se encuentra la persona a la que acompañamos, puesto que sus necesidades van a ser distintas en cada una de las distintas etapas.
Una vez conseguido el cambio hacia la abstinencia, nos centramos en la prevención de recaídas.
La familia también necesita ayuda. La convivencia con un enfermo alcohólico suele ser muy complicada a causa de la imprevisibilidad de su conducta y de su estado de ánimo. Es importante tratar e intervenir sobre los conflictos y los diferentes síntomas que van surgiendo en la familia. Es común que los familiares experimenten ansiedad, culpa, disminución de la autoestima y otros síntomas que son una dificultad añadida para la recuperación del paciente. Solo una familia emocionalmente fuerte tendrá la capacidad para ayudar al alcohólico en su recuperación.