En el post anterior comentábamos algunas diferencias entre el alcoholismo femenino y masculino. Nos centrábamos en la menor tolerancia biológica de la mujer frente al alcohol y en la distinta motivación que suele existir para beber entre ambos.
Hoy nos vamos a centrar en algunas características que suelen aparecer en el alcoholismo femenino con mayor frecuencia que en el hombre.
- El estigma social de la mujer bebedora es mucho mayor que en el hombre. La sociedad continua rechazando con mucha mayor fuerza a la mujer que queda atrapada por el alcohol
- En la mujer suele ser mucho mayor el sentimiento de culpa relacionado con la bebida. Esto va a hacer que los mecanismos de defensa sean mucho más acusados que en el hombre.
La negación se establecen con una fuerza inusitada, para mantener oculto su alcoholismo. Empiezan a ocultar la bebida casi desde el principio en los lugares más impredecibles.
- La mujer tiene mucho menos apoyo familiar y social para superar la dependencia. Una prueba de ello puede ser la composición de los grupos de familiares que suelen tener una mayoría aplastante de mujeres. Los hombres no suelen acompañarlas al tratamiento.
- Aunque tanto en hombre como en mujeres el alcoholismo suele acompañarse de otras patologías en las mujeres son más frecuentes
- Los trastornos afectivos y de ansiedad
- Los trastornos de somatización
- Los trastornos alimenticios Bulimia
- Los trastornos de personalidad dramáticos y emocionales
- El patrón de consumo es distinto en las mujeres adultas y mayores que en las jóvenes y adolescentes. En el primer grupo el consumo suele ser clandestino, secreto y en solitario mientras que las segundas se parecen más en cuanto a prevalencia de consumo y formas de éste al hombre. Botellones, bebida social…
- El alcoholismo en la mujer suele acompañarse de menor problemática laboral y legal que en el hombre
- En la mujer los problemas familiares y de salud suelen ser mayores que en el hombre.
- La mujer suele acudir en menor medida a los centros especializados. Acuden con mayor frecuencia a los dispositivos de atención primaria , con procesos secundarios (ansiedad, depresión , dolores, traumatismos…) que suelen enmascarar el alcoholismo, que además no suele explorarse ni detectarse en estos servicios por parte del personal sanitario
Podríamos resumir los 5 últimos post sobre el alcoholismo en la mujer, diciendo que la enfermedad alcohólica puede atrapar a hombres y mujeres sin distinción.
Hay elementos comunes a ambos que se refieren a lo esencial del alcoholismo. La pérdida de control frente al alcohol, que va desplazando todos los intereses anteriores y se convierte en el centro de la vida del alcohólico/a las complicaciones que produce el abuso continuado de las bebidas alcohólicas.
Por otra parte es lógico que dadas las distintas características de los hombres y de las mujeres, se manifiesten de forma distinta esta enfermedad. Los patrones de consumo pueden ser distintos, la vulnerabilidad es distinta y posiblemente la forma de tratarlo sea distinta
Cuando hablamos de que cualquier tratamiento debe ser especializado, debe comenzar por distinguir que hombres y mujeres somos distintos y el abordaje por tanto tiene que tener esto en cuenta.
Bibliografia
- Alcohol y Atención Primaria de la salud. Informaciones clínicas básicas para la identificación y el manejo de riesgos y problemas
Biblioteca Sede OPS Catalogación en la fuente Anderson P, Gual A, Colon J
Washinton D.C :OPS 2008
- Trastorno por consumo de alcohol
- Mujer y alcohol .La soledad acompañada
San Miguel adicciones
Punto Rojo Libros 2016
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