GRACIAS muchas gracias al Dr Reina y todo su equipo.

A mi y a mi familia también nos salpicó el alcohol. Casi sin darme cuenta se implantó en medio de nosotros y fue oxidándose desde dentro. Golpeó mi matrimonio, sacó de mi lo peor y consiguió que llegara a odiar a mi marido por lo que se estaba y nos estaba haciendo. Quería que él tocara fondo para que se diera cuenta de lo que ocurría pero fui yo la que tocó fondo.

Con la ayuda del Dr Reina y su equipo y desde la Fe que profeso, abordaron el problema de forma totalmente individual, se adaptó a nuestras circunstancias y con el soporte de los grupos de Choni, consiguieron lo imposible. Arrancarlo de nuestras vidas.

Ha pasado más de un año y con el giro de 180º que ha dado nuestras vidas puedo decir que SOMOS UNA FAMILIA FELIZ. De nuevo mil gracias.