Presentar a un amigo siempre es complicado, porque resaltar los valores profesionales, de una persona, a la que quieres y admiras y ser a la vez objetivo no es tarea fácil. El doctor Morera al que conocí hace bastantes años en la Asociación Anclaje donde trabajó durante mucho tiempo, es un enamorado de la ayuda a los enfermos alcohólicos. Ha trabajado en muy diversos dispositivos, tanto públicos como privados y en todos ellos ha destacado por su buen hacer profesional y su gran humanidad. Hombre tranquilo y pragmático tiene una gran experiencia de la que espero podamos sacar provecho en esta entrevista.

. P.- Dr. Morera para empezar me gustaría comenzar una pregunta que yo aún sigo preguntándome. El alcoholismo es considerado como una enfermedad ¿En qué consiste esa enfermedad? Ante todo, muchas gracias por la presentación, el cariño y la admiración sabes que es mutua. Además, te considero mi maestro en este tema. Cuantas más personas con problemas con el alcohol atendemos, más cuestiones nos surgen respecto a la enfermedad del alcoholismo. [Tweet «El uso del alcohol provoca modificaciones en nuestro organismo, orgánicas y psicológicas.»] Hay una adaptación individual al alcohol, tanto de nuestro cerebro como en las respuestas a situaciones adversas y en nuestro estilo de vida, olvidando otros intereses, para darle cabida. También la familia, nuestras relaciones sociales y laborales cambian. Se ha creado un contexto donde el uso de alcohol es diario o episódico, parece inevitable, provocando daños al individuo y a quienes le rodean, esta situación mantenida en el tiempo es la enfermedad, la prioridad es el alcohol.

P.- ¿Podría explicarnos brevemente como debería ser el tratamiento del alcoholismo? El tratamiento del alcoholismo comienza desde la primera entrevista. Deberíamos conseguir hacer repaso biográfico de la relación con el alcohol, qué ha influido para llegar a la situación actual e intentar que asuma el protagonismo en su recuperación, y en ese proceso acompañar al enfermo y facilitarle el camino. Nosotros tenemos que facilitar la desintoxicación, el que logre la abstinencia, tratar patologías que influyen como causa o mantenimiento del uso de alcohol.

P.- Es una creencia muy extendida en las Asociaciones de auto ayuda que no es posible el abordaje del alcoholismo hasta que este toque fondo. ¿Está de acuerdo con esto? No, y creo que es compartido por muchos, que cuando atendemos por primera vez a un alcohólico, ya es consciente que su problema con el alcohol tiene varios años de evolución. El abordaje y la intervención tienen que adaptarse a la fase de la enfermedad y a los objetivos que se plantea el enfermo.[Tweet » Cuanto antes pida ayuda e intervengamos, menos graves serán las consecuencias de la enfermedad.»]

P.- Usted ha trabajado y trabaja en Centros donde los enfermos alcohólicos están ingresados de forma voluntaria ¿Cuando es necesario un ingreso de un alcohólico? Yo creo que el ingreso es necesario cuando la desintoxicación así lo aconseje porque el consumo de alcohol sea muy elevado o el paciente esté muy afectado orgánicamente, también si el distanciamiento del medio lo hace aconsejable por estar muy deteriorado o cuando la persona no logra la abstinencia. De todas formas, a los enfermos de larga evolución, cuando la familia es disfuncional, o hay patología psiquiátrica lo hace aconsejable. También pienso que el ingreso facilita los primeros momentos del tratamiento, por lo que se debería usar con más frecuencia, haciendo un trabajo paralelo con la familia.

P.- ¿Cómo piensa que pueden colaborar las Asociaciones de auto ayuda y los profesionales que atienden estos problemas, psiquiatras y especialistas en adicciones? La asociación de auto ayuda son muy útiles para un grupo importante de enfermos alcohólicos, necesitan identificarse con otros enfermos con sus mismos problemas y en distintas fases de recuperación, compartiendo experiencia de rehabilitación y ayudándose. Los profesionales debemos de colaborar con ellos en la desintoxicación y en la patología asociada que dificulta su recuperación, tanto individuales como en las familiares y sociales.

P.- ¿Cuándo piensa que es el mejor momento para pedir ayuda? ¿Qué dificultades piensa que existe para pedirla? Lo ideal sería que no tuviera que ocurrir, que los programas de prevención lograsen que nadie padeciese la enfermedad, pero no ocurre. Cuanto antes se solicite la ayuda mejor. Muchos padres no saben cómo ayudar a sus hijos menores de edad que comienzan a beber alcohol, ni cuando surgen los primeros problemas asociados a éste. Tampoco los amigos y familiares. En nuestra sociedad, donde el beber alcohol está muy tolerado, la relación con el alcohol es un hecho que nos acompaña durante toda la vida. Cuando surgen los primeros problemas se plantea como un reto personal el control del alcohol, sin exponer el problema ni solicitar ayuda. El percibirlo como fracaso personal y con vergüenza dificulta más la solicitud de ayuda. También en este campo el papel del médico de atención primaria es muy importante, formarle para que detecte las primeras fases del alcoholismo y facilitarle la derivación es importante.

P.- Hasta hace relativamente poco tiempo los alcohólicos sólo tomaban bebidas alcohólicas, alcohol y tabaco. ¿En la actualidad sigue ocurriendo lo mismo? En mi experiencia no, el patrón de consumo del alcohólico ha cambiado en los últimos años, pero también personas que tomaban solo cannabis o heroína no solían beber alcohol y esto también ha cambiado. Hay bebedores que toman cocaína para poder seguir bebiendo o como parte del repertorio habitual de consumo. Otros beben alcohol para aliviar la ansiedad que le produce la cocaína. Los heroinómanos en tratamiento con metadona, en muchas ocasiones, también mantienen un consumo abusivo habitual de alcohol. Las complicaciones son mayores y el tratamiento más específico. Ya no es habitual que una persona acuda a tratamiento solo por problemas con el alcohol.

P.- Se dice que mucho de los sin techo son alcohólicos y enfermos mentales. ¿Sabe si existe algún programa en España para ellos? Lo ignoro. A nivel personal, colaboro con una Fundación que tiene un centro para tratamiento de enfermos alcohólicos, donde tiene cabida estos enfermos, realizando un abordaje integral. Hoy día, con el recorte de subvenciones, seguramente tendremos que recortar el número de plazas dedicadas a estas personas.